Ponencia presentada en el
marco del encuentro internacional organizado por la Confederación
Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS) y el Gran Oriente de Francia
el 9 de marzo de 2024 sobre el "Estado de derechos y las libertades
públicas en América Latina y el Caribe".
MI VIDA VA PROHIBIDA, DICE LA
AUTORIDAD.
Los derechos de los migrantes
en el contexto de la migración intercontinental.
Por Margarita Rojas Blanco
IL .·. H .·. Guillaume Trichard, Gran
Maestro del Gran Oriente de Francia, muy buenas tardes.
IL .·. H .·. Rafael Fonseca Cardona, Presidente
de la Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS), muy buenos
días.
Queridos Hermanos y Hermanas en
sus grados y oficios, muy buenos días y muy buenas tardes.
Para mí es un honor y motivo
de gran felicidad, estar en este maravilloso espacio de fraternidad y reflexión.
Para contextualizarlos sobre
mi ponencia, les debo decir dos cosas:
La primera es que la
protagonista, Jacky, está representando a dos mujeres que existen, dos mujeres
reales. Jacky es pues un personaje que representa a millones de mujeres que les
ha tocado ser guerreras de verdad.
La segunda, es que trabajé
hace unos años para la Organización Internacional para las Migraciones OIM, apoyando a los migrantes.
Comienzo:
Jacky corre a la máxima
velocidad que le permite su corazón. Siente punzadas en el pecho, pero las
ignora, como aprendió a ignorar las miradas juzgadoras, o los comentarios
mezquinos. Punzada, mirada y palabra duelen igual. Piensa en medio del remolino
de recuerdos que se le atraviesa y aturde y la quiere tumbar, que está
condenada a la soledad del migrante, una estirpe que a veces parece sin
oportunidad alguna sobre la faz de la tierra.
Mientras huye, Jacky se da
cuenta de algo tremendamente doloroso: no sabe cuántos años tiene con exactitud,
y piensa que va a morir sin saber algo tan valioso. Para usted que me lee, es
un dato básico al que no se le presta mucha atención, pues tanto usted como yo,
tuvimos el privilegio de nacer en tierras bendecidas, pero es que a diferencia
de nosotros, Jacky creció en un campamento de refugiados; su mamá la llevó unos
años después de nacer, buscando protección, buscando apoyo, buscando agua, esa
que los dioses antiguos crearon, pero que los dioses nuevos usurparon,
privatizaron, vendieron.
Nuestra heroína hasta hace unos
años vivía en el campo de refugiados más grande del planeta, en Kutupalong, en
una de las costas de Bangladesh, donde viven 900.000 rohingyas.
A los rohingyas, a Jacky, no
los quieren en su país natal; tampoco en el vecino que los acogió y por tal
razón, viven en el límite entre ambos, aislados, y aumentando su población de
manera permanente. Es un panorama doloroso, no solo por la atrocidad de la
situación, sino porque no es el único campamento que existe en este punto azul
pálido al que románticamente llamamos hogar.
Vivía Jacky en Cox´s Bazar,
pero sus deseos de salvar el mundo, y léase entre líneas, salvarse a ella
misma, la llevaron a aceptar la oferta de trabajo de cuidar a un bebé de una
familia en una playa cercana. Alejada de todo, Jacky trabajaba de sol a sol, sin
descanso, y era brutalmente golpeada cada vez que la bebé lloraba.
Una noche, Jacky decide que
debe escapar de allí, teniendo claro que no tiene nada claro, solo la luz plateada
de la luna y un enorme deseo de libertad. Toma una pequeña mochila en la que guarda
una bata, un par de sandalias y un pedazo de pan, no se le ocurre que más podría
llevar, como equipaje, ante la misión de la vida.
Tan pronto pasa el umbral de
la puerta emprende la huida, mientras mira a lo lejos las luces parpadeantes de
la ciudad lejana. Tuvo la extraña sensación de haber perdido algo. El destino
se había interpuesto entre ella y eso que llamamos vida. Su mente se puso en
blanco al mismo tiempo que sentía que todo oscurecía a su alrededor. Jacky solo
corría sin mirar atrás. Cuando por fin llegó a la oficina de la Organización
Internacional para las Migraciones, sintió que había envejecido varios años.
La Organización Internacional
para las Migraciones (OIM), forma parte del Sistema de las Naciones Unidas y es
la organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve una migración
humana ordenada para beneficio de todos, con 175 Estados Miembros y presencia
en 171 países.
El jefe de protección de la
OIM apoya a Jacky para entrar en un programa de ayuda a los migrantes que no
saben leer ni escribir, cosa que ella aprendió en su paso por el campamento de
refugiados y que dadas las circunstancias le es bastante útil ahora mismo.
Jacky se convierte en interprete y con el paso del tiempo, de alguna manera es
adoptada por la oficina. La agencia la envía a la India y de allí a Londres,
donde comienza a estudiar y trabajar como reportera, contando la historia de
los millones de inmigrantes intercontinentales que hay en el planeta.
Y es que, de acuerdo con el derecho internacional, los
migrantes poseen derechos humanos inherentes a su condición de seres humanos.
Tanto el derecho consuetudinario internacional como los instrumentos
internacionales de derechos humanos, tienen un alcance universal y, por ende,
establecen los deberes y derechos aplicables a los migrantes. Además, existen
otros instrumentos internacionales que se centran específicamente en la
protección de los migrantes y en garantizar sus derechos.
Estamos
hablando aquí que todos los derechos humanos son aplicables a todos los
migrantes sin excepción alguna, si bien existen derechos relacionados con la
movilidad que adquieren especial relevancia en el contexto de la migración,
como la libertad de movimiento, el derecho a buscar asilo, el derecho a la
nacionalidad y el derecho a la unidad familiar.
Vemos
entonces que no existe una categoría separada de "derechos de
migración" dentro del amplio cuerpo de derechos desarrollados por la
comunidad internacional. Los derechos relevantes para los migrantes derivan del
derecho internacional de los derechos humanos, el derecho de los trabajadores
migrantes y el derecho humanitario.
Por lo tanto, todos los
migrantes son seres humanos que poseen derechos humanos y libertades
fundamentales e inalienables, reconocidos universalmente en instrumentos internacionales
como la Declaración Universal de Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea
General de las Naciones Unidas en 1948.
Los derechos humanos no pueden
ser arrebatados ni transferidos a otra persona. Por eso se describen como
inalienables. En principio, los derechos humanos están garantizados para todas
las personas presentes en un Estado, incluidos los migrantes, independientemente
de su estatus legal o periodo de estancia. Estos derechos deben aplicarse sin
discriminación, lo que implica que ninguna diferencia entre las personas puede
justificar la supresión o la negación de los derechos humanos y las libertades
básicas. Aunque algunos derechos humanos y libertades pueden ser limitados en
circunstancias específicas, los derechos humanos fundamentales y las libertades
nunca pueden ser suspendidos, como el derecho a la vida y la prohibición de la
tortura.
La evaluación del
acceso de los migrantes a los derechos puede realizarse mediante la medición de
los derechos otorgados a los migrantes en principio y en la práctica. La
primera parte es relativamente sencilla y consiste en examinar las
ratificaciones de tratados internacionales y regionales por parte de los
Estados, así como su legislación nacional para respetar, proteger y cumplir los
derechos de los migrantes. Por otro lado, la evaluación de la aplicación de los
derechos, es decir, si los derechos de los migrantes se respetan y ejercen
efectivamente, es más compleja y requiere examinar la implementación en la
práctica.
En mi paso por la OIM, tuve la
oportunidad de trabajar en lugares de difícil acceso en Colombia, con población
rural dispersa en zonas de conflicto, apoyando a migrantes en su ejercicio de
la agricultura familiar. Esta agricultura se caracteriza por utilizar la fuerza
de trabajo familiar, no se emplean personas ajenas a la familia, y el proceso
productivo lo realiza el núcleo familiar (Abuelos, padres, hijos, nietos). En
los países en desarrollo 3,000 millones de personas viven en áreas rurales (eso
equivale a casi la mitad de la población mundial). Y por favor escúchenme bien,
de esta población 2,500 millones están vinculados directamente a la agricultura
de los cuales 1,500 millones corresponden a pequeños agricultores y agricultura
familiar.
En una de mis intervenciones en
territorio, recuerdo a una mujer extranjera a la que apoyé a producir y hacer
sostenible una huerta en el patio de su casa. La mujer con un candoroso orgullo
me mostraba su pequeña y hermosa huerta, cultivada con mucho amor:
- Doctora, le voy a mostrar a usted como
es que mis lechugas han crecido tanto – Me dijo y acto seguido, comenzó a
cantarle a las plantas.
– Es que cuando uno le canta a las
maticas, ellas entienden y se ponen felices y crecen más rápido- dijo la mujer.
La escuché atentamente, terminé con un
nudo en la garganta, y un par de lágrimas de ternura. Sentí que estaba frente a
todas las personas que han existido y existirán, a las que les tocó luchar sin
tregua en su paso por la vida, las que les tocó la difícil, esa vida en la que hay
que ser resiliente para no maldecir.
Fue esto en el mar verde de Colombia, el
Urabá antioqueño, en la frontera con Panamá por el tapón del Darién, en la que
de manera ilegal, arriesgando la vida, cientos de personas diariamente se van
selva adentro, buscando llegar a América del Norte. El sol canicular me hacía
sudar tanto, que la lagrima se mezcló con sal y creo que no se enteraron de mi pequeña
tragedia.
Cuando salimos de la casita, caminando
por la calle polvorienta del pueblo olvidado de Dios, tuvimos que parar para
darle paso a un elegante y enorme bus Pullman, con las ventanas selladas para
que el aire acondicionado no se saliera y ni el polvo ni el calor infernal que
nos cocinaba se entrara. Desde los limpísimos vidrios climatizados nos miraron
los turistas con curiosidad y uno nos tomó una foto.
- Son
los turistas extranjeros que van a la isla- Dijo uno de mis compañeros de
trabajo que habitaba en la zona.
- Ahora
los suben a unos yates y los llevan para la isla. Pasan todos los días a esta
hora, llevando y trayendo turistas extranjeros-
- ¿Nunca
se bajan? - pregunté.
- Nunca
se bajan- respondió mi amigo y seguimos para otra casita.
Pero
regresemos a los derechos de los migrantes, de los que ahora Jacky se encarga
de que todos conozcan, y es que debemos tener en cuenta que existen muchos instrumentos
establecidos particulares para lo protección de los mismos, en el marco del
derecho internacional público, que incluyen:
- Los tratados y
convenciones específicos sobre migración y refugiados.
- Los acuerdos
bilaterales y regionales sobre migración y derechos de los migrantes.
- La legislación nacional
de los países de origen, tránsito y destino de los migrantes.
- Las disposiciones de
derecho internacional humanitario que pueden ser aplicables en situaciones
de migración forzada o desplazamiento.
Les quiero ahora hacer un repaso de los Tratados internacionales de derechos humanos y sus protocolos adicionales, que otorgan derechos a los migrantes en virtud de su condición humana:
Año |
Tratado |
1948 |
Declaración
Universal de Derechos Humanos |
1963 |
Convención
Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
Racial |
1966 |
Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales |
1966 |
Convención
Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
Racial |
1979 |
Convención
sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer |
1984 |
Convención
contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes |
1989 |
Convención
sobre los Derechos del Niño |
1990 |
Convención
Internacional sobre la Protección de los Derechos de Todos los Trabajadores
Migratorios y de Sus Familiares |
2006 |
Convención
sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad |
2006 |
Convención
Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las
Desapariciones Forzadas |
Existen
también los Tratados fundamentales del derecho público internacional que
establecen derechos a los migrantes y deberes de los Estados:
Año |
Tratado |
1949 |
Convenio sobre los Trabajadores Migrantes
(Nº 97) de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) |
1951 |
Convención sobre el Estatuto de los
Refugiados y su Protocolo de 1967 |
1954 |
Convención sobre el Estatuto de los
Apátridas |
1961 |
Convención para Reducir los Casos de
Apatridia |
1974 |
Convenio Internacional para la Seguridad de
la Vida Humana en el Mar |
1975 |
Convenio sobre las Migraciones en
Condiciones Abusivas y la Promoción de la Igualdad de Oportunidades y de
Trato de los Trabajadores Migrantes (Nº 143) de la OIT |
1979 |
Convenio Internacional sobre Búsqueda y
Salvamento Marítimos (SAR) |
1982 |
Convención de las Naciones Unidas sobre el
Derecho del Mar |
2000 |
Protocolo para Prevenir, Reprimir y
Sancionar la Trata de Personas, Especialmente Mujeres y Niños, que
complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia
Organizada Transnacional |
2000 |
Protocolo contra el Tráfico Ilícito de
Migrantes por Tierra, Mar y Aire |
2011 |
Convenio sobre el Trabajo Decente para las
Trabajadoras y los Trabajadores Domésticos |
Por último, están las fuentes de datos que
miden los derechos de los migrantes en principio o la ratificación de tratados:
Nivel |
Fuente de información |
Mundo |
Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos
Humanos (ACNUDH) |
Europa |
Consejo de Europa |
África |
Unión Africana |
Las Américas |
Organización de los Estados Americanos (OEA) |
Asia Sudoriental |
Asociación de Naciones de Asia Sudoriental (ASEAN) |
Les quiero leer los dos
primeros artículos de la declaración universal de los derechos humanos, para
que tengamos claridad de lo arriba expuesto:
Artículo 1
Todos los seres humanos nacen
libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia,
deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
Artículo 2
Toda persona tiene todos los
derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de
raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra
índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier
otra condición. Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición
política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción
dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un
territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a cualquier
otra limitación de soberanía.
Y ahora revisemos las cifras:
Según las últimas estimaciones
elaboradas por la División de Población de la OIM, en 2020, el número de
migrantes internacionales en todo el mundo —personas que residen en un país
distinto de su país de nacimiento— alcanzó los 281 millones. Las mujeres migrantes
constituyen el 48% de los migrantes internacionales.
Según el Proyecto Migrantes
Desaparecidos de la OIM, desde 2014 se han registrado más de 63.000 muertes de
migrantes en todo el mundo. La ruta migratoria más mortífera es el Mediterráneo
central, donde al menos 22.871 personas han perdido la vida. Por otro lado, la
ruta migratoria terrestre más letal del mundo es la frontera entre Estados
Unidos y México.
Sobre los Refugiados
En todo el planeta hay 30
"situaciones activas", según el Alto Comisionado de Naciones Unidas
para los Refugiados (ACNUR).
Estos son algunos de los campos y
asentamientos más poblados:
- Cox's Bazar, Bangladesh: 900.000 personas en el mayor campo del mundo.
- Dadaab y Kakuma (Kenia): Kenia es uno de los países que más refugiados acoge en África: 539,084 refugiados y solicitantes de asilo.
- Bentiu (Sudán del Sur): El campo de Bentiu, en el norte de Sudán del Sur, es el más grande del país y actualmente da cobijo a unas 120.000 personas. El vecino Sudán acoge a su vez a más de 1.000.000 de refugiados.
- Zaatari (Jordania): En total son 5,6 millones de refugiados, de los que más de 277.000 están registrados en campos.
- República Democrática del Congo: Más de 5,6 millones de congoleños han tenido que abandonar sus hogares. Además, la RDC acoge a su vez más de medio millón de refugiados de otros países, en su mayoría de República Centroafricana.
Sobre Palestina, tema que he estudiado
desde la Universidad y que es de mi particular interés por su importancia
histórica:
Desde la primera guerra árabe-israelí
en 1948, cientos de miles de residentes de la histórica Palestina y sus
descendientes han vivido como refugiados dentro de su propio territorio o en
otros países de Oriente Próximo, como Siria, Líbano y Jordania. Este éxodo fue
desencadenado por un conflicto político que los obligó a abandonar sus hogares
hace más de 70 años.
Para finalizar debemos también tener en
cuenta las contribuciones de las diásporas al desarrollo de los pueblos y los
derechos humanos:
La OIM define a las diásporas como migrantes o descendientes de migrantes cuya identidad y sentido de pertenencia, ya sea real o simbólico, han sido moldeados por su experiencia migratoria y sus antecedentes.
- Más del 70% de los países que participan en el Programa de Migración a nivel mundial, han establecido una diáspora o instituciones de emigración.
- Uno de cada tres países del programa de migración a nivel mundial, involucra a su diáspora en su agenda estableciendo e implementando políticas de desarrollo.
- Dos tercios de los países a nivel mundial aceptaron la doble ciudadanía.
- Se estima que los inmigrantes generan el 9,4% de la población mundial del PIB.
- En todo el mundo existen más de 200.000 organizaciones de la diáspora y de inmigrantes.
Por último, las fechas especiales:
En diciembre de 2000, la Asamblea
General de las Naciones Unidas proclamó el 18 de diciembre como el Día
Internacional del Migrante y en junio de 2018, se proclamó que el 16 de junio es el Día
Internacional de las Remesas Familiares, reconociendo el impacto transformador
de las remesas de los migrantes en el apoyo a las estrategias de desarrollo, en
particular en la reducción de la pobreza de los hogares y en su acceso a los
servicios básicos.
Es mi palabra.
Félicitations TCS, et merci
ResponderEliminar¡Merci beaucoup!
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